Ángel Antonio Barrios (41), el hombre detenido el último martes en Puerto Iguazú acusado de asesinar a uno de sus hermanos, se abstuvo de declarar ante la Justicia y fue imputado bajo una calificación que podría depararle la prisión perpetua en el futuro.
De acuerdo a lo consignado por diversas fuentes consultadas por El Territorio, el sujeto fue trasladado durante el fin de semana al edificio del Juzgado de Instrucción Tres de Puerto Iguazú, donde debía comparecer en audiencia de declaración indagatoria ante el magistrado Martín Brites.
En esa instancia, Barrios designó abogado defensor oficial y cuando se le brindó la oportunidad de dar su versión de los hechos optó por abstenerse de declarar, tal como lo ampara su derecho.
A continuación, las autoridades procedieron a informarle de los elementos de prueba e indicios que hasta el momento se tienen en su contra y le notificaron formalmente su imputación por el delito de homicidio agravado por el vínculo, figura que prevé una pena de prisión perpetua en caso de ser hallado culpable en un futuro debate oral y público.
De todas formas, las fuentes indicaron que la instrucción del caso continúa en marcha y conforme a lo que se recolecta en el marco de la investigación pueden haber modificaciones en el futuro.
Mientras se aguarda obtener el resultado de todas las pericias ordenadas, el paso siguiente será comenzar con la ronda de testimoniales y en terminar de confirmar fehacientemente el lazo familiar entre ambos involucrados. Justamente esto último es lo que podría modificar el panorama.
Alboroto y crimen
Barrios está detenido desde el martes a la mañana, cuando el barrio Villa Alta de Puerto Iguazú fue testigo del trágico final de una secuencia de violencia familiar.
Según lo que se pudo reconstruir hasta el momento, todo comenzó en horas de la madrugada, cuando el ahora imputado se enfrentó a dos hermanos mellizos que aparentemente constantemente hostigaban y maltrataban a su madre.
Supuestamente, las advertencias de parte del hombre que ahora está detenido no eran nuevas, pero ese martes la situación llegó al límite y se cansó del accionar de sus hermanos, quienes constantemente llegaban en plena madrugada a la casa de su madre y lo hacía en forma intempestiva y en estado de ebriedad, reclamando comida y exigiendo que cocine para ellos.
Esa madrugada, los hermanos de Barrios estuvieron consumiendo bebidas desde temprano, por lo que al momento del hecho se encontraban alcoholizados.
El alerta del hecho llegó cerca de las 3.30, cuando el mellizo del fallecido llegó a la guardia de la comisaría más cercana manifestando que, en una casa sobre calle Hugo del Carril, su hermano Ángel estaba intentando agredir a sus familiares con un cuchillo.
Una vez en el lugar, los uniformados tomaron contacto con Beatriz (33), otra hermana de los implicados, quien narró que minutos antes Ángel había hincado a Higinio Barrios (36), quien buscó resguardo en la casa pero terminó muriendo desangrado.
Fue la joven quien narró en exclusiva a este matutino que su madre había salido, por lo que ella estaba en la casa junto a otro hermano y el sospechoso encerrado en la suya. Fue en ese contexto que llegaron los mellizos Isidro Reinaldo e Higinio Guillermo reclamando comida, por lo que ella abrió la puerta y les entregó algunas empanadas que habían quedado de la cena.
El alboroto que protagonizaron los mellizos fue escuchado por Ángel Antonio desde su casa, por lo que salió al patio enfurecido, con el cuchillo en la mano. No sabía que la madre no estaba, pero igual comenzaron a discutir por las actitudes que tenían, les reclamó el trato y en determinado momento atacó a los hermanos al grito de: ‘¡Me tienen podrido!’.
La primera puñalada fue para Isidro, que la esquivó y corrió hasta la comisaría en busca de ayuda, mientras que Higinio pretendió hacer lo mismo pero no pudo. La estocada fue en la zona del hombro izquierdo y produjo el sangrado que derivó en su muerte.
El informe médico policial detectó una herida punzocortante en cara anterior del hombro izquierdo, excoriación regional external media, leve excoriación en región cresta ilíaca izquierda y herida cortante en región palmar de mano derecha.
Después de todo esto, el sujeto se entregó a los policías que rodearon su domicilio y ello dio pie a un allanamiento de la propiedad. El procedimiento fue realizado por los efectivos de la División Criminalística de la Unidad Regional V, quienes lograron incautar dos cuchillos, uno tipo puñal con mango de plástico y hoja lisa, además de otro tipo puñal con hoja serrucho. Ambos serán peritas para establecer cuál el arma homicida.
Antecedentes de crímenes entre familiares
- Matricidio
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El 6 de noviembre del año pasado, una larga historia de violencia de género terminó en tragedia en San Antonio. Alfonso Adaria (45) estaba golpeando, una vez más, a su esposa, y su hijo lo mató para defender a su madre. El chico quedó imputado por homicidio en exceso de la legítima defensa de terceros y fue excarcelado. - Por una máquina
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Fuente: El Territorio
